Tuesday, July 11, 2006

La División de los países no solo es un Fenómeno Boliviano y Peruano, También es Mexicano

En Méxco, hemos visto hace unos dias un proceso intenso y polarizado entre los Pro-Liberalismo a la Latinoamericana (Caricatura de Liberalismo solo para transacionales) y los descontentos en un movimiento pro-izquierda de López Obrador. Este proceso no ha sido la lucha encarnizada de un Nacionalista versus un vende patria, sino de los descontentos con una forma de llevar el gobierno y el estado contra aquellos que buscan beneficiarse cada vez más olvidando al resto.

Es una lucha entre norte y sur, entre el méxico pre-capitalista y el méxico indígena y miserable.
ya no es solo una lucha de clases sino una verdadera separación de formas de ver el mundo de que hacer para salir adelante y ver hacia el futuro. Todos recordamos a los Zapatistas del comandante marcos, reinvindicando a los indígenas de Chiapas, aquellos que en méxico son vistos como seres inferiores sin derechos, muy similar a los relatos de abusos a los aborígenes en el Perù por sus propios connacionales. Hoy ese abuso se ha ampliado a todo el sector que se considera así mismo postergado por las medidas pro-globalización de Vicente Fox, postergado por un TLC con EEUU que en 12 años solo ha producido miseria en la región sur del país; donde la agricultura ha sido totalmente destruida como si de una guerra se tratara, donde la esperanza de "sobrevivir" se basa solamente en ir al norte a trabajar en alguna maquila en condiciones infrahumanas, incluso en contra de su salud, porque las mismas transnacionales que en otros paìses tienen medidas especiales de seguridad, por el liberalismo entregista de Fox se han visto en un escenario de libertinaje, donde el trabajador es reducido a un mero recursos desechable e incluso por el racismo hacia los habitantes del sur es visto como inferior y maltratado.

Un escenario que nos muestra que el "dilema del indio vigente otra vez en el siglo XXI" y los abusos contra estos ya no lo hacen los gamonales del campo, sino ahora son los esbirros de las transacionales, ya no solo es un abuso al aborigen sino al mestizo, a quien también consideran de poco valor y sin derecho alguno. Ese es el resultado del TLC luego de 12 años, "De Apertura y Prosperidad".

Ese es el fondo del problema, que hoy vive México, un cambio de rumbo a gritos que unos piden, y otros prefieren vivir del comercio de la importación, del Gobierno, al igual que algunos aplauden a Toledo y de seguro son en su mayoria empleados estatales beneficiados por ser de su partido o afines en alguna relación comercial que se beneficia del modelo pseudo-liberal. En México también hay de esos y muchos más que en Perú; en México la corrupción es una institución nacional, mas que un problema general. Hoy esos dos mundos se han polarizado totalmente en 50% a 50%, con clamores de Fraude, que a estas alturas no sería nada descabellado.

Esto nos muestra un fenómeno doble en Latinoamérica, por un lado una división Norte, Sur, como en México-Perú, Este-Oeste, como en Bolivia, basado en temas raciales y culturales; que tiene raíces antiguas pero que hoy se ha pronunciado y quizás estemos ante un escenario de "no vuelta atrás". Por otro lado en la otra cara del fenómeno estamos ante una lucha entre la Modernidad expresado en el mundo industrial y comercial global y lo Tradicional que representan los valores, el Agro nativo de cada región; en sociedades que están por lo menos 100 años atrasadas respecto a los países del primer mundo estariamos en un escenario pre-guerra de secesión que se dió en América del Norte a mediados del siglo XIX; en la medida que los intereses económicos y culturales se vuelvan inconciliables este escenario se acercará; y no se trata de un fenómenos Andino sino más bien latinoamericano que no es una mera lucha de clases, sino una lucha de culturas un "Choque de Civilizaciones".

En latinoamérica, la tensión se acrecienta mientras la disparidad social, racial, económica se acrecienta, mientras políticos incapaces y carentes de visión se fijan en como saquear el fisco y al contribuyente, en vez de tomar las riendas a soluciones, unos se pierden en la demagogia y la corrupción, otros siendo hijos de esta son elegidos nuevamente.

México es un país grande y la identidad es más fuerte, es posible que ellos tomen las riendas pero en el Ande el escenario actual es visto como estar en la tranquilidad del ojo del huracán.

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